Ven, ven ahora, que quizá no sea demasiado tarde
todavía.
Ven pronto, que quién sabe si no se ha perdido
todo; ven; y si fuera tiempo… ¿Y si la vida quiso esperar
un minuto más?…
Ven, por piedad; no escuches al que ha hablado de muerte,
no rompas tu cántara vacía, no mires a la
sombra que se ha echo…
Cierra los ojos y corre, corre, a ver si puedes llegar
más pronto que la noche.