
La Farmacia Santa Lucía fue propiedad del doctor Luis Rodríguez Baz y estuvo ubicada en el número 697 de la Calzada del Cerro (Máximo Gómez) en la Habana. Respondía al teléfono M-5255 y anteriormente al A-3255.
Su propietario doctor Luis Rodríguez Baz dirigía personalmente el despacho de las fórmulas y atendía un moderno departamento de óptica, donde por sí mismo hacía el examen de ojos antes de vender los lentes que cada cliente necesitaba.
Contaba el señor Rodríguez Baz con treinta años de experiencia en 1927. Su farmacia se encontraba abierta día y noche con servicio de mensajeros.1
A propósito de la familia Rodríguez Baz encontramos una interesante nota2 que dice así:
Diario de la Marina. Marzo 1903. María de la Concepción. —Una más en la universal familia cristiana. María de la Concepción es la sonrisa de un hogar. Sus padres, doña Concepción Alfonso y el señor Luis Rodríguez Baz, cifran en la tierna criatura sus mayores alegrías y sus más halagadoras promesas.
Fué bautizada María de la Concepción el domingo último en la iglesia parroquial del Cerro, siendo sus padrinos su hermano Luis y la señorita Clara Rodríguez Baz. A todos nuestros parabienes y para la nueva cristiana muchos besos y muchas felicidades.
Corresponderá a la señorita Rodríguez-Baz y Alfonso la declamación de la poesía “Curiosidad infantil” durante una Velada Literario-Musical celebrada por profesores y alumnos del Colegio de Escuelas Pías del Pilar el domingo 18 de febrero 1912. 3
En ocasión de la Asamblea de los Droguistas, Dueños de farmacias y Farmacéuticos celebrada en la Escuela de Medicina (Belascoaín y Zanja) se trató en 19184 de un problema palpitante: la cuestión del cierre de las farmacias a las seis de la tarde, como ocurría con los demás comercios de la Habana y del resto de la República. Presidió el acto, provisionalmente, el doctor Luis Rodríguez Baz, propietario de la farmacia “Santa Lucía”, del Cerro 697, actuando como Secretario el doctor Celestino García Morales, de la farmacia Folgueras 15, del propio barrio del Cerro.
Herminia Delgado y el doctor Luis Rodríguez Baz una boda elegante en la Parroquia del Vedado

Las bodas de fin de año.5 En sus postrimerías ya. Muy interesante, de rango y de elegancia, la celebrada anoche en la Iglesia Parroquial del Vedado. Con la bendición de Monseñor Manuel Arteaga, ilustre Provisor del Arzobispado de la Habana, quedó solemnemente consagrada la unión de la señorita Herminia Delgado, del aristocrático faubourg (barrio) del Cerro, muy graciosa y muy bonita, y el joven doctor Luis Rodríguez Baz (hijo) y Alfonso.
Llegó al templo la novia radiante de gracia, espiritualidad y gentileza. Encantadora Herminia. Con una toilette suntuosa. Un traje el que llevaba que hacía honor por su novedad, gusto y elegancia a la célebre modista Marie Tentou.
La tela, de la última creación en su clase, llamada etincelant, aparecía combinada con encajes. Valiosos encajes de Bruselas que se conservan como reliquia en la familia de la novia. Con ellos se casaron tanto la abuelita de Herminia como su señora madre. La cola de tul. Prendida de los hombros. Y una corona de azahares y lirios que pertenece a la exclusiva colección de modelos de Marie Tentou.
A la elegancia de la toilette correspondía, con su exquisita belleza, el ramo de mano. Creación de Magriña. Con lirios y rosas. Lo dedicó a su sobrina la señorita Emma Montejo, cediéndolo después la adorable fiancée a la hermana del novio, la señorita Conchita Rodríguez Baz.
Fueron los padrinos la distinguida señora Conchita Montejo de Delgado, madre de la desposada, y el padre del novio, doctor Luis Rodríguez Baz.
Testigos. Por la señorita Delgado. El doctor Fernández Abreu, Rector de la Universidad, y los doctores Francisco R. Cartaya y Enrique Casuso. Á su vez actuaron, como testigos por parte del novio el doctor Félix Pagés, eminente cirujano, de la gran casa de salud La Purísima Concepción, el ingeniero Luis de Sena y el distinguido funcionario de la carrera consular cubana señor Leopoldo Pereira.
En la parte musical de la ceremonia se lucieron el joven José Valls, notable violinista, y el Padre Eugenio Pérez, organista de la Iglesia del Vedado. Se estrenó la melodía dedicada a la novia, compuesta expresamente para el acto, por el profesor Valls.
En la finca de los padres de la desposada, La Conchita, en Santiago de las Vegas, pasarán las horas primeras de su luna de miel Herminia y Luis. Llegue hasta ellos mis votos. Son por su felicidad.
Bibliografía y notas
- “Dr. Luis Rodríguez Baz”. Diario de la Marina. Año XCV, núm. 155, 5 de junio de 1927, p. 16 ↩︎
- “María de la Concepción”. Diario de la Marina. Año LXIV, núm. 73, 26 de marzo de 1903, p. 7 ↩︎
- “Las Escuelas Pías del Pilar”. Diario de la Marina. Año LXXIII, núm. 41, 17 de febrero de 1912, p. 11 ↩︎
- “La Asamblea de los Droguistas y Farmacéuticos”. Diario de la Marina. Año LXXXVI, núm. 61, 2 de marzo de 1918, pp. 1, 10. ↩︎
- Fontanills, Enrique. “Habaneras. Boda elegante en la Parroquia del Vedado”. Diario de la Marina. Año XCIV, núm. 363, 30 de diciembre de 1926, p. 7 ↩︎
Deja una respuesta