La Flor Cubana fue un establecimiento de víveres finos, dulcería y helados propiedad de Ramón Amor en la Habana. Por muchos años, gozó esta casa del más sólido prestigio y del favor de las principales familias.
La alta calidad de los productos que expendía, la modicidad de sus precios y el servicio excelente que prestaba a su numerosa clientela, fueron la base de la popularidad de este establecimiento que se especializaba en refrescos de frutas naturales y en helados de la más exquisita calidad.
Todas las tardes de cinco a siete, se reunía en el salón para familias, un grupo excelentísimo de nuestro mundo bien, favorecedores asiduos de esta casa a la que demostraban una especial predilección.
El establecimiento La Flor Cubana era propiedad de Ramón Amor y se encontraba en la Avenida de Italia (Galiano) número 96 esquina a la calle de San José. Respondían a los teléfonos A-4284 y M-9016.
La marca de comercio “La Flor Cubana” amparaba pan, galletas, helados, vinos, vinagres, aceites, mantecas, quesos, mantequillas, sandwiches, frutas secas, pastas para sopa, alcoholes, aguardientes y licores. Se solicitó en 1916 y se otorgó en junio de 1918.1
Por escritura de 1920, ante el Notario don Tomás Salava y de la Fuente y con efectos retroactivos al día primero del mes de julio, se constituyó una sociedad mercantil amparada por la razón social de Amor y Compañía S. en C. Se dedicó esta a explotar del establecimiento “La Flor de Cuba” que antes giraba bajo el solo nombre de José Amor Rodríguez.2
Formaban parte de la sociedad Amor y Compañía S. en C., como gerentes con uso de la firma social los señores Ramón Amor Rodríguez y don Manuel Méndez Rico, y como comanditario don José Amor Rodríguez.
Enrique Fontanills el cronista social habanero anunciaba aquel mismo año una tarjeta que decía así: “Irene García y Ramón Amor tienen el gusto de participar a usted su efectuado enlace y ofrecerle su nueva morada en la calle de San Miguel número 78, altos.”3
Para Marzo 1ro. de 1923 y por escritura de esta fecha, otorgada ante el Notario de la Habana doctor Francisco García Montes, se disolvía la sociedad que giraba con el nombre de R. Amor S. en C. habiéndose hecho cargo del activo y pasivo de la misma el señor Ramón Amor.4
Retrazando la vida de Ramón Amor propietario de La Flor Cubana podemos encontrar pinceladas como la que a continuación transcribimos en parte:
Ecos del Vedado. El Brillante Asalto al Hogar de los Esposos García Amor.5
Hermoso y animado resultó el asalto verificado la noche del último miércoles en la residencia de los amables esposos señora Irene García y señor Ramón Amor dueño de “La Flor Cubana” en 10 y 13 de la aristocrática barriada del Vedado.
Tuvo este asalto visos de un verdadero baile de trajes en el cual se admiraron los más caprichosos y vistosos de época entre los celebrados este año. A las 9 de la noche la casa de 10 y 13 estaba ocupada por numerosas y distinguidas familias sobresaliendo elegantes damas y hermosas señoritas. A las 10 dió principió el baile, no decayendo un solo momento hasta las primeras horas de la madrugada.
Los asistentes eran recibidos por la bella señora de la casa Irene García de Amor, quien tenía para todos palabras de afecto y cariño, prodigándoles su afable gentileza. El adorno de la elegante residencia de los esposos García-Amor, resultaba tan artístico y hermoso como original.
Guirnaldas de flores en forma de pabellón, intercaladas con grandes campanillas y miles de focos eléctricos, se extendían a lo largo de los jardines, portales y en el interior de la casa en combinación artística con las enredaderas y variadas plantas de los ideales jardines de la casa, perfumaban el ambiento haciendo del lugar un edén.
La orquesta de Duarte, Almeida y Molina interpretó un programa selecto y escogido, viéndose obligados a bisar6 casi todos sus números, en fuerza de ser aplaudidos por la numerosa y complacida concurrencia. Su labor merece también nuestro sincero aplauso…
No siempre fueron tiempos felices, también los hubo tristes como los del sensible fallecimiento de Juan Amor García padre de los comerciantes José, Antonio y Ramón Amor Rodríguez. El señor Juan Amor García (q. e. p. d.) falleció a sus noventa años de edad en Lugo, España el 25 de abril de 1926. La noticia se recibió por cable en la Habana.7
Bibliografía y notas
- “La Flor de Cuba. Certificado de propiedad”. Boletín Oficial de Marcas y Patentes. Secretaría de Agricultura, Comercio y Trabajo. Año XIII, núm. 1, 31 de julio de 1918, p. 31 ↩︎
- “La Flor Cubana”. Diario de la Marina. Año LXXXVIII, núm. 174, 27 de julio de 1920, p. 6 ↩︎
- “Una tarjeta que dice así”. Diario de la Marina. Año LXXXVIII, núm. 277, 9 de octubre de 1920, p. 5 ↩︎
- “Sociedades y Empresas”. Diario de la Marina. Año XCI, núm. 50, 13 de marzo de 1923, p. 2 ↩︎
- “Ecos del Vedado. El Brillante Asalto al Hogar de los Esposos García Amor”. Diario de la Marina. Año XCIII, núm. 44, 6 de marzo de 1925, p. 2 ↩︎
- Bisar: Hacer un bis repitiendo una pieza o un fragmento en un concierto o en un espectáculo teatral. Sin.: repetir. Academia Real Española. ↩︎
- “Sensible fallecimiento. Don Juan Amor”. Diario de la Marina. Año XCIV, núm. 118, 28 de abril de 1926, p. 2 ↩︎
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