

La Revista Bimestre Cubana. A propósito de su reaparición. Desde 1830 trataba la Comisión de Literatura de la Real Sociedad Patriótica de la Habana, de fundar un periódico literario y científico, por el estilo de las grandes revistas inglesas Edinburgh Review y Quarterly Review.
Por otra parte, el ilustrado catalán, don Mariano Cubí y Soler, profesor de idiomas y frenólogo, que llegó á la Habana en 1829, había también concebido el mismo proyecto, y estando ya compuesto é impreso el número primero de la Revista y Repertorio Bimestre de la Isla de Cuba, fundada por él, correspondiente á Mayo-Junio, 1831, se resolvió reunir en una sola ambas empresas periodísticas, dejándose al criterio de los individuos de la citada Comisión de Literatura la revisión de los artículos. (Véase el “Aviso al Público” antepuesto á este primer número de la Revista).
Se publicó, desde el número 2, con el título de Revista Bimestre Cubana, durando el referido acuerdo hasta Abril de 1832, en que fué cedida por Mariano Cubí la propiedad del periódico á la Comisión de Literatura, de la cual formaban parte Domingo del Monte, Manuel González del Valle y Nicolás de Cárdenas y Manzano.
La Comisión nombró entonces al insigne José Antonio Saco, individuo de su propio seno y socio de mérito de la Sociedad, para que se encargara “así de la dirección como de la agencia del papel”, haciéndose constar que serían de su cuenta “tanto las pérdidas como las ventajas que resultaren de la publicación”, aunque reservándose la Comisión el derecho de propiedad sobre el periódico.
Saco empezó á dirigir la Revista con el número 7, Mayo-Junio, 1832, y fué precisamente en esta entrega donde vió la luz su memorable artículo sobre la obra del Reverendo Walsh intitulada Notices of Brazil in 1828 and 1829, en el cual hablaba Saco del “horrendo tráfico de carne humana” que “se prosigue á despecho de las leyes”.
Respecto á este artículo, en que tan duramente condenaba el ilícito comercio de esclavos, escribió él en 1844:
“Pocos fueron los que entonces supieron leerlo con imparcialidad. La opinión del país, dolorosamente extraviada, alzó el grito contra su autor; vióse éste calumniado y perseguido; maquinóse la venganza, buscáronse pretextos con que cohonestarla y en castigo de sus sanas intenciones recibió al fin los honores de la expatriación.” (Colección de papeles, t. II, p. 86).
Se publicaron sólo diez números de la Revista, constando aproximadamente de 100 páginas cada uno, formando 3 tomos, tamaño de 21 por 15 centímetros. El último número, que lleva fecha Mayo, 1834, no llegó á repartirse, y en 13 de Septiembre de ese año tuvo Saco que abandonar su patria, perseguido y virtualmente desterrado de la isla por sus viriles escritos y por su enérgica defensa de la Academia Cubana de Literatura, institución ésta íntimamente ligada con la Revista Bimestre.
Colaboraron en ella, además de Saco y Mariano Cubí, Domingo del Monte, José de la Luz y Caballero, Francisco Guerra Betancourt, Blas de Osés, el Pbro. Francisco Ruiz, el Capitán Lcdo. Pedro Sirgado y Zequeira, Atanasio Carrillo y Arango, Félix Varela y otros.
Merecen citarse, por lo menos, los juicios que hicieron de la Revista Bimestre los eminentes literatos Manuel José Quintana y George Ticknor.
El primero escribió que, en su opinión “y en la de todos los que en España conservan amor á la verdadera filosofía y á las letras, es el mejor periódico español que se ha publicado de muchos tiempos á esta parte, no sólo por sus sanos principios, selecta doctrina y claro y elegante estilo, sino por la justa elevación, noble entereza y laudables miras que le animan”. (Revista Bimestre Cubana, t. III, p. 274).
Ticknor se expresó del siguiente modo: “Nada que pueda compararse con la antedicha Revista se ha presentado nunca que yo sepa, en ninguna de las colonias españolas. Nada hay tampoco en España que se le equipare; pues jamás se ha proyectado en Madrid una Revista de tanto ingenio, fuerza y variedad”.
Y según Montoro, “aun hoy, puede decirse (de este periódico) que no se ha publicado después en nuestro idioma ninguno que, dentro de su plan, lo aventaje”.
Recorriendo en nuestra mente las revistas cubanas más notables de distintas épocas, tales como El Observador Habanero, las Memorias de la Sociedad Económica, La Siempreviva El Álbum, La Piragua, La Habana Literaria, la Revista de Cuba, la Revista Cubana, La Ilustración Cubana, El Fígaro, Cuba y América, etc., no hallamos ninguna que la supere, y sólo una, las imperecederas Hojas Literarias de Manuel Sanguily, puede sin reservas colocarse justamente á la misma altura de la célebre Revista Bimestre Cubana.
La reaparición de tan notable Revista, después del transcurso de 76 años, fausto suceso que sinceramente celebramos, reviste, por consiguiente, excepcional interés. Teniendo en cuenta lo que fué aquel memorable periódico, y quienes en sus páginas colaboraron, pudiera juzgarse arriesgado y temerario su resucitación en estos tiempos impropensos de plena decadencia intelectual, en que casi no existe la preocupación literaria y científica que ha caracterizado otras épocas de nuestra historia, si no fuese que al frente de la nueva empresa figuran por fortuna personas tan eruditas y competentes como los Sres. Fernando Ortiz y Ramiro Cabrera.
Aun con sus grandes recursos intelectuales (y el Sr. Ortiz es un talento privilegiado y posee una cultura tan vasta como sólida), tendrán que realizar una intensa y prodigiosa labor, á fin de que la Revista, en esta su nueva etapa, no desdiga de su antiguo renombre.
Queremos ver también en la reaparición de la Revista Bimestre Cubana, un tributo debido á la memoria del glorioso patricio, “el mejor de los cubanos”, según, frase de Domingo del Monte, que fué por ella condenado á la expatriación y en hora triste expulsado de esa misma Sociedad Económica. Justo, pues, y por demás interesante, es recordar aquí las siguientes palabras, que semanas antes de su muerte escribió Saco á su amigo José Valdés Fauly:
“Me alegro de que las cosas hayan cambiado, y que pueda pronunciarse mi nombre con toda libertad. Tan duros fueron conmigo, que hasta me borraron de la lista de los miembros de la Sociedad Patriótica de la Habana; y esto que fuí nombrado dos veces socio de mérito; una por la Memoria que presenté sobre caminos; y otra, por la de las causas de la vagancia en Cuba y modo de combatirla.
Aún hay más. Esta misma memoria, á pesar de haberse llevado el primer premio en el concurso, no mereció los honores de ser impresa en las Memorias de aquella Sociedad. Cuando me sintiere algo mejor de salud, y estuviere de humor, tal vez escribiré sobre este asunto al Director de la mencionada Sociedad, pues creo que la postergada Memoria debe figurar al lado de tantas otras.” (Carta, de Barcelona, 5 de Agosto, 1879. Colección póstuma, (Habana, 1881, p. 491).
LUIS M. PÉREZ.
Con este brillante y concienzudo artículo del erudito joven Luis Marino Pérez corresponde El Fígaro al saludo de los directores de la nueva “Revista Bimestre Cubana”, Dres. Ortiz y Cabrera.
Bibliografía y notas
- Pérez, Luis Marino. “La Revista Bimestre Cubana”. El Fígaro. Año XXVI, núm. 15, 10 de abril 1910.
- Escritores y poetas
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