• Saltar a la navegación principal
  • Saltar al contenido principal
  • Saltar a la barra lateral principal
  • Saltar al pie de página
  • PORTADA
  • CONTACTO

Cuba Memorias

Historia de una Isla

  • Pinar del Río
    • Mariel
    • Pinar del Río
  • Habana
    • Aguacate
    • Batabanó
    • Guanabacoa
    • Güines
    • Jaruco
    • Madruga
    • Nueva Paz
    • San Nicolás
    • Santa Cruz del Norte
  • Matanzas
    • Alacranes – Alfonso XII
    • Agramonte – Cuevitas
    • Arcos de Canasí
    • Bolondrón
    • Cárdenas
    • Carlos Rojas – Cimarrones
    • Coliseo
    • Colón – Nueva Bermeja
    • Jagüey Grande
    • Jovellanos – Bemba
    • Juan Gualberto Gómez – Sabanilla
    • Limonar – Guamacaro
    • Los Arabos – Macagua
    • Manguito – Palmillas
    • Martí – Hato Nuevo
    • Máximo Gómez – Recreo
    • Pedro Betancourt
    • Perico – Cervantes
    • San José de los Ramos – Cunagua
    • San Miguel de los Baños
    • Santa Ana de Cidra
    • Unión de Reyes
    • Varadero
  • Las Villas
    • Caibarién
    • Cienfuegos
    • Cruces
    • Sagua la Grande
    • Sancti Spíritus
    • Santa Clara – Villa Clara
    • Trinidad
  • Camagüey
    • Nuevitas
  • Oriente
    • Baracoa
    • Campechuela
    • Holguín
    • Manzanillo

Antonio Maceo carta al coronel Federico Pérez

02/02/2020 Por Almar Deja un comentario

Carta enviada por Antonio Maceo desde el Roble, Pinar del Río, al coronel Federico Pérez Carbó en Nueva York y fechada 14 de julio de 1896.

Antonio Maceo Grajales en una foto estilo medallón.

Al coronel Federico Pérez. —New York. —

Mi querido coronel y amigo: he leído con mucha satisfacción su carta del 29 de Junio. Estoy medio contento con el alijo del doctor Castillo. La falta de elementos no me llevó á la desesperación porque la suplí con otros, no menos importantes, para el caso.

Por eso gestiono ahora el envío de cuanto tengo pedido; no quiero verme en las astas del toro. Parece que ni el Delegado ni el Gobierno, han tenido en cuenta la importancia de la invasión, para favorecerme á tiempo; pero sí lo han hecho con los hijos mimados de la fortuna, con los cuales siguen los privilegies y desaciertos preparando disgustos.

Lamento lo ocurrido con las expediciones. Si las mías vienen en la forma y condiciones pedidas, no sucederá lo mismo. El enemigo está acobardado allí donde hay gente veterana y muchos elemento; aquí cuesta pegarle duro: hay jefes á quienes corren todavía.

Cierto que el número de combatientes es diferente, pues yo he llegado á tener en Las Villas y aquí, una persecución de 75,000 soldados con los mejores jefes del ejército enemigo. Aquí no hay un palmo de tierra que no esté bañado con sangre cubana y española.

Ni la campaña del 71 fué para mí más ruda. Sin embargo, he gozado mucho viendo realizarse un día y otro mi sueño dorado, y así he podido pegar á los españoles y romperles la crisma á sus mejores generales.

De España jamás esperé nada; siempre nos ha despreciado, y sería indigno que se pensase en otra cosa. La libertad se conquista con el filo del machete, no se pide: mendigar derechos es propio de cobardes incapaces de ejercitarlos. Tampoco espero nada de los americanos; todo debemos fiarlo á nuestros esfuerzos; mejor es subir ó caer sin su ayuda que contraer deudas de gratitud con un vecino tan poderoso.[1]

Miró está enfermo porque aun no tiene ninguna herida; esto lo hace sufrir. Dígame que sabe de José, mi hermano. Escríbale diciéndole que pida venir para acá, donde hay campo para todo el mundo; que si por intrigas se ve colocado en mala situación, haga lo que yo siempre he hecho; que no se preocupe de que no se recompense la pureza de sus sentimientos y el mérito de sus servicios, que le baste la propia satisfacción de haber siempre cumplido y de no haber servido á España.

Están al llegar los elementos de guerra que trajo Leyte Vidal. Todo se salvó; ya debía estar en mi poder á estas horas, pero no tiene usted idea del estado de los caminos á consecuencia de las torrenciales y continuas lluvias que han caído de un mes á esta parte.

Al doctor Castillo dígale que le felicito por lo bien que salió de su arresto. Se me antoja, por ciertas noticias de la prensa, que ya está navegando otra vez con rumbo hacia acá. Le deseo que pronto esté completamente restablecido. Y ahora, luego y siempre trabajando por Cuba libre. A mí también me pellizcaron, pero fué cosa insignificante; ya estoy curado y otra vez de pelea.

Le abraza su affmo.
—A. Maceo.—
El Roble, Julio 14 de 1896.

Bibliografía y notas

[1] Las frases que hemos subráyado son las mismas que redactó Maceo; así están en el original, que obra en poder del coronel Federico Pérez y en el copiador de la correspondencia que tenemos nosotros. Hacemos esta salvedad, porque en el monumento del Cacahual se han esculpido en otros términos, que ni siquiera son análogos, y carecen de sentido y de intención. Parece que, al grabarlas allí se trataba de complacer á los españoles y á los americanos, por cuanto se omitió el pensamiento capital. Si se quiere rendir tributo á la verdad, deben ser borradas de aquella columna, y sustituirlas por las que hemos copiado literalmente.

  • Miró Argenter, J. (1943). Cuba, Crónicas de la Guerra. La Campaña de Occidente. (2nd ed., Vol. III). Habana: Editorial Lex. pp. 292-293

Publicado en: Guerra de Independencia Etiquetado como: Antonio Maceo Grajales

Interacciones con los lectores

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Barra lateral principal

Buscar en el sitio:

Categorías

Donar

Recrear la historia y los hombres no es tarea fácil... si le gustó mi trabajo puede hacer una donación, grande o pequeña servirá para crear contenido! Gracias!

Censos de la Isla de Cuba desde la Colonia hasta el siglo XXI

Inspectores del Censo de Cuba en 1899. Agustín H. Agüero, Manuel Rasco, Sabás Meneses, Claudio Dumas, Juan Bautista Jiménez y Pedro Pequeño.

División política y administrativa de la Isla de Cuba

Mapa de la Isla de Cuba y tierras circunvecinas según las divisiones de los naturales. José María de la Torre y de la Torre, Habana 1841. B.N.F

Presidentes de la Isla de Cuba

Vista del Palacio de Gobierno de los Capitanes Generales y de los Presidentes de Cuba en la Habana.

Comentarios recientes

  • Juana Rosa Herrera Maros en Administración Municipal de Agramonte en 1942
  • Almar en Manguito antes Palmillas y sus barrios Amarillas y Calimete
  • Maytee Fernandez de Velasco en Manguito antes Palmillas y sus barrios Amarillas y Calimete

Footer

Recursos

Política de Privacidad.

Enlaces

Negocios Habana Negocios Las Villas Negocios Matanzas Negocios Oriente

Interesantes

Historias y Leyendas Escritores y Poetas

Seguir

Facebook Youtube

Copyright © 2025 · Cubamemorias.com