• Saltar a la navegación principal
  • Saltar al contenido principal
  • Saltar a la barra lateral principal
  • Saltar al pie de página
  • PORTADA
  • CONTACTO

Cuba Memorias

Historia de una Isla

  • Pinar del Río
    • Mariel
    • Pinar del Río
  • Habana
    • Aguacate
    • Batabanó
    • Guanabacoa
    • Güines
    • Jaruco
    • Madruga
    • Nueva Paz
    • San Nicolás
    • Santa Cruz del Norte
  • Matanzas
    • Alacranes – Alfonso XII
    • Agramonte – Cuevitas
    • Arcos de Canasí
    • Bolondrón
    • Cárdenas
    • Carlos Rojas – Cimarrones
    • Coliseo
    • Colón – Nueva Bermeja
    • Jagüey Grande
    • Jovellanos – Bemba
    • Juan Gualberto Gómez – Sabanilla
    • Limonar – Guamacaro
    • Los Arabos – Macagua
    • Manguito – Palmillas
    • Martí – Hato Nuevo
    • Máximo Gómez – Recreo
    • Pedro Betancourt
    • Perico – Cervantes
    • San José de los Ramos – Cunagua
    • San Miguel de los Baños
    • Santa Ana de Cidra
    • Unión de Reyes
    • Varadero
  • Las Villas
    • Caibarién
    • Cienfuegos
    • Cruces
    • Sagua la Grande
    • Sancti Spíritus
    • Santa Clara – Villa Clara
    • Trinidad
  • Camagüey
    • Nuevitas
  • Oriente
    • Baracoa
    • Campechuela
    • Holguín
    • Manzanillo

Ravenscrag hoy, soñando las calles junto a vientos de otoño.

25/01/2022 Por Almar Deja un comentario

Ravenscrag, Montréal, QC, Canada, Octubre 31, 2020.
Ravenscrag, Montréal, QC, Canada, Octubre 31, 2020.

Junto a vientos de otoño anduve las calles, casi desiertas y sin embargo, llenas de matronas que salen armadas de nasobucos. Una empuja un carrito de compras y se posiciona en una parada de autobús, otra ayudada por dos bastones de marcha se imprime un rítmico movimiento volando sobre las caídas hojas y la tercera pelirroja veloz pasa corriendo perseguida por las calorías.

Hay que pagar por parquear y respirar el aire puro de este Monte Real. Contra todo pronóstico la multitud marcha porque aquí se valoran caminantes y naturaleza. Los árboles han perdido casi todo su follaje y las hojas disimulan el suelo con tonos de mostazas y pintalabios.

El chalet que corona la montaña tiene un gigantesco jardín de formas cementadas, la inmensa plataforma comanda el panorama y las flechas de cobre en sus parapetos indican las montañas en la distancia. Nada queda a la ventura, todo ha sido pensado, desde la inocente barrera que protege al descuidado caminante hasta el cartelón de la zona de peligro.

Enfilo por las escaleras de madera que descienden las faldas del monte. Los que bajan se deslizan en éxtasis y los que suben aspiran el aire buscando la presa que huye. Allí debajo se encuentra el monumento casi desconocido de Simón McTavish, el león dieciochesco que hacía temblar los comerciantes.

Allí, en un rincón olvidado queda una estela de piedra que recuerda su memoria y marca el lugar donde gustaba meditar. Antes estaba el demolido monumento funerario del que se dice era de los más antiguos de la ciudad. El sencillo homenaje recuerda la invencibilidad del tiempo.

A su lado Ravenscrag, parte del sitio patrimonial del Monte Real y de la milla dorada donde vivían los más pudientes y los Sires. El “nido de cuervos“ con su atalaya, sus blasones, su caballeriza, su casa de empleados, su verja monumental, devenido hospital desde mil novecientos cuarenta al ser donado por Hugo Andrés Montagu.

De la cabeza de demonio que corona uno de los muebles de la biblioteca pocos saben, hoy si podemos hablar de ello, es treinta y uno de octubre, la noche de las reliquias en la que se tallan calabazas y, los niños disfrazados salen al anochecer a la calle para ir preguntando por las casas marcadas con los símbolos de la pagana fiesta ¿La bolsa o la vida? Y cobran en chocolates y golosinas.

Hoy es diferente. El locutor de radio pregunta a sus oyentes a qué hora las sombras de la luna abren sus puertas, los niños están desorientados y los caramelos contentos.

Frente a la casona que domina la cima, sin palabras un cuervo vino a despedirse antes de que partiera del Monte Real. Graznó y miró a través de su ojo marrón oscuro, dicen que puede imitar la voz humana.

Todo lo contado aquí no es ficción… es la serena convicción de que pese a todo lo que pudiera afectarnos o aunque la vida parezca anodina el secreto está en los detalles. Es poder ser capaz de ver más allá de lo insignificante y comprender que la capacidad de soñar solo tiene un dueño ¡Nosotros! Ese poder, pese a todo, debemos mantenerlo intacto.

A. Martínez, Oct. 31, 2020

Bibliografía y Notas

  • Escritores y Poetas.

Publicado en: Escritores y Poetas Etiquetado como: Alfredo Martínez

Interacciones con los lectores

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Barra lateral principal

Buscar en el sitio:

Categorías

Donar

Recrear la historia y los hombres no es tarea fácil... si le gustó mi trabajo puede hacer una donación, grande o pequeña servirá para crear contenido! Gracias!

Censos de la Isla de Cuba desde la Colonia hasta el siglo XXI

Inspectores del Censo de Cuba en 1899. Agustín H. Agüero, Manuel Rasco, Sabás Meneses, Claudio Dumas, Juan Bautista Jiménez y Pedro Pequeño.

División política y administrativa de la Isla de Cuba

Mapa de la Isla de Cuba y tierras circunvecinas según las divisiones de los naturales. José María de la Torre y de la Torre, Habana 1841. B.N.F

Presidentes de la Isla de Cuba

Vista del Palacio de Gobierno de los Capitanes Generales y de los Presidentes de Cuba en la Habana.

Comentarios recientes

  • Juana Rosa Herrera Maros en Administración Municipal de Agramonte en 1942
  • Almar en Manguito antes Palmillas y sus barrios Amarillas y Calimete
  • Maytee Fernandez de Velasco en Manguito antes Palmillas y sus barrios Amarillas y Calimete

Footer

Recursos

Política de Privacidad.

Enlaces

Negocios Habana Negocios Las Villas Negocios Matanzas Negocios Oriente

Interesantes

Historias y Leyendas Escritores y Poetas

Seguir

Facebook Youtube

Copyright © 2025 · Cubamemorias.com