En la calle de Plácido número tres de la ciudad de Matanzas estuvo instalado el popular Salón Ensueño propiedad de Roberto Sánchez Fundora.
El establecimiento se dedicó a prestar servicios en el giro de dulcería, repostería y helados, siendo sus especialidades los dulces finos para bodas, bautizos, banquetes, helados y frozen malteado.
Sánchez Fundora nació en Matanzas en 1901 y dedicó todas sus energías al progreso y prestigio del establecimiento.
Por su laboriosidad y sus vastos conocimientos como Maestro Dulcero y Repostero pudo colocar al Salón Ensueño a la altura de los mejores salones de la Capital.
Contaba el local con un moderno aparato de frozen lo que le permitió aumentar su extensa y distinguida clientela.
En 1937 contrajo matrimonio Roberto Sánchez Fundora con la distinguida dama Pola Navia Montejo.
Bibliografía y notas
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