La Casa Versalles fue propiedad de F. Fernández e Hijo y se especializaba en el ramo de víveres finos desde su fundación, logrando, como ninguna otra, cimentar su crédito en la forma, más sólida y acrecentar sus negocios fiel a su lema de “ALTA CALIDAD DE LOS PRODUCTOS Y PRECIOS ECONÓMICOS”.
La Casa Versalles mostró siempre un marcadísimo interés por destacar y popularizar todos los productos del país y a ese efecto en todas sus propagandas comercializaba ventajosas ofertas a su numerosa clientela en relación con esos productos.
El arroz del país era una de las especialidades características de esta casa; ya que en Cuba se hacía sentir la necesidad de obtener un arroz para el consumo que siendo cosechado en el propio país, reuniera las buenas cualidades de los arroces importados de la India y con ese propósito se puso en relación con el señor Luis M. Quesada, de Camagüey.
Este señor, gracias a una labor inteligente y perseverante, consiguió un tipo de arroz que, según los peritos en la materia, era el más alimenticio que se conocía y de más agradable sabor.
Este arroz, conocido con el nombre de Criollo-Versalles, marca genuinamente cubana, se vendía en el establecimiento de los señores F. Fernández e Hijo, cubanos meritísimos que supieron levantar el prestigio y el nombre de la Casa Versalles, hasta colocarlo en un sitio de vanguardia entre los comercios afines.
La Casa Versalles editaba todos los meses un artístico catálogo de precios, que llegaba a las manos de su numerosa y distinguida clientela con rigurosa exactitud y hemos tenido ocasión de constatar que los nombres más conocidos de familias de la Habana y del Vedado, figuraban en la lista de sus habituales favorecedores.
Ofrecer esta información a los lectores, hace justicia a la laboriosidad, inteligencia y crédito comercial de dos cubanos, se complace en felicitar a los señores F. Fernández e Hijo por su magnífico esfuerzo en destacar y popularizar productos nacionales.
La solicitud de la marca de comercio “Casa Versalles” fue presentada el 4 de noviembre de 1927 por F. Fernández e Hijo con domicilio en Simón Bolívar (Reina) número 52, Habana. Amparaba la marca víveres de todas clases, vinos y licores.1
A mediados de 1931 el local de la Casa Versalles se alquilaba anunciándose en la prensa de esta manera: “Un espacioso local para establecimiento en Reina 52, entre Manrique y campanario, antigua Casa Versalles”.2 Al año siguiente una mueblería anunciaba sus liquidaciones.3 Más tarde ocupará el local la Casa Edison dedicada al negocio de radios e instalaciones de antenas.4
Existió otra Casa Versalles en 1923 que fue quincallería y estuvo en lugar tan céntrico como la calle de Neptuno número 24. Montada a la moderna y con todos los refinamientos vendía artículos de fantasía, porcelanas, lámparas, cristalería, etc.5 Al frente de esta Casa Versalles, y suscribiendo su razón social, aparecían los señores Jesús García, Rafael Valle y Constantino Pérez, procedentes los tres de la Casa de Hierro.
Bibliografía y notas
- “Marca de Comercio: Casa Versalles”. Boletín Oficial de Marcas y Patentes. Secretaría de Agricultura, Comercio y Trabajo. Año XXII, núm. 6, diciembre 1927, p. 4 ↩︎
- “Se Alquilan”. Diario de la Marina. Año IC, núm. 157, 29 de junio de 1931, p. 18 ↩︎
- “Muebles y Prendas”. Diario de la Marina. Año C, núm. 284, 11 de octubre de 1932, p. 17 ↩︎
- “Talleres de la casa Edison”. Diario de la Marina. Año CIII, núm. 268, 10 de noviembre de 1935, p. 22 ↩︎
- “Casa Versalles”. Diario de la Marina. Año XCI, núm. 213, 1 de agosto de 1923, p. 7 ↩︎
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