Matanzas: Instituciones y Negocios

La Zona Franca en el Puerto de Matanzas única salvación de la ciudad desde Bohemia en 1934. Polvo. Miseria. Telarañas en las viejas cajas de caudales, exhaustas y decorativas. Casas destartaladas. Baches, aceras rotas. Jardines descuidados, pelados, polvorientos, tristes. Comercios en ruinas, lanzados a mil equilibrios para cubrir los graves compromisos de las contribuciones.

Georges Claude el científico francés que regaló una piscina a Matanzas. El Apagón es entre los invitados inoportunos de estos tiempos el que más se pasea de boca en boca y de barrio en barrio. Cuando llega la noche movemos el interruptor y mágicamente, si no hemos sido desconectados del circuito, se enciende el bombillo que claro está requiere de energía.

La inauguración del Palacio de Justicia de Matanzas el día 30 de agosto 1911 fué causa de que afluyeran á esta ciudad caracterizados elementos sociales. La ciudad rebozaba de entusiasmo y los edificios públicos vestían sus hermosas galanuras patrióticas; los consulados y sociedades desplegaron sus banderas. Un día fresco , lleno de luz clarísima , teniendo por techumbre un cielo azul y transparente.

La casa de J. B. Skidmore y Cía. se dedicó a la venta de automóviles y sus accesorios en la ciudad de Matanzas. Abrió sus puertas gracias al norteamericano John B. Skidmore quien fue veterano de la guerra hispanoamericana.¹

Inauguración del Acueducto Burriel en Matanzas. Frecuentemente hemos tenido ocasión plausible de mencionar a la bella ciudad del Yumurí, perla americana cuyo Oriente pulen de continuo la cultura, la ilustración, el patriotismo y la generosidad de sus vecinos.

Plantaciones de cáñamo y henequén en Matanzas de la Raffloer Erbsloh & Co. Si se pregunta qué se cultiva en Cuba con fines comerciales, la respuesta es invariablemente: “Azúcar”. Pero aparte del hecho de que muchos otros productos de Cuba contribuyen constantemente a abastecer el mercado mundial, hay uno sobre el que, comparativamente, se sabe poco.